La resiliencia es la capacidad de adaptarse y recuperarse frente a situaciones de adversidad, estrés o trauma. Se refiere a la habilidad de afrontar las dificultades, superarlas y salir fortalecido de ellas. Las personas resilientes tienen la capacidad de mantener un equilibrio emocional y psicológico en momentos difíciles, encontrando formas de enfrentar los desafíos y aprender de las experiencias adversas.
La resiliencia no implica evitar o negar el dolor o la dificultad, sino más bien enfrentarlos de manera constructiva y buscar formas de crecimiento personal a partir de ellos. Se considera una cualidad fundamental para la salud mental y emocional, ya que permite a las personas enfrentar los desafíos de la vida de manera más efectiva y mantener una actitud positiva frente a las adversidades.
Unos mil millones de personas en todo el mundo padecen enfermedades ligadas al estrés. Una tendencia en aumento. ¿Qué protege a quienes se mantienen sanos? ¿Es innata su resiliencia? ¿O se puede aprender a soportar el estrés crónico y las crisis?
Este reportaje se embarca en un viaje a las mentes más destacadas en la investigación de la resiliencia, entrevistando a expertos en epigenética y neurocientíficos. En el mayor centro de resiliencia de Europa, en Maguncia, los investigadores llevan a cabo un estudio a largo plazo para averiguar qué mecanismos utilizan las personas para mantenerse mentalmente sanas a pesar del estrés y las crisis. En el sur de Francia, se reúnen con Boris Cyrulnik, pionero en la investigación sobre la resiliencia. Su credo: no sólo los individuos tenemos que asumir el desarrollo de nuestra resiliencia; la sociedad y la política también deben crear condiciones de vida que faciliten una salud mental estable. También contamos la conmovedora historia de dos familias unidas por la tragedia: tras la muerte violenta de sus dos hijos, que eran amigos, luchan por encontrar el camino de vuelta a la vida.
Nuestras experiencias, nuestro entorno y nuestros genes: todo influye en nuestra resiliencia mental. La resiliencia no es una palabra mágica ni una promesa de felicidad, sino un proceso de aprendizaje permanente.